domingo, 26 de julio de 2020

Un mundo feliz (Aldous Huxley)

“En una sociedad debidamente organizada como la nuestra, nadie tiene la menor oportunidad de comportarse noble y heroicamente”

Lectura # 142 



Ficha técnica:

Título del ejemplar: Un mundo feliz
Autor: Aldous Huxley
País de autor: Reino Unido
Año del ejemplar: 2019, de la edición de 1969, Random House Mondadori S.A.
Editorial: Editorial Penguin Random House Grupo Editorial S.A. Sello Debolsillo
Título original: Brave New World
Año de publicación en el idioma original: 1932
Idioma original: inglés
Editorial: --
Traducción: Ramón Hernández
Género: Ciencia ficción. Distopía.
Edición: físico
Otros datos:
Páginas: 255
Contenido de la obra: Un (01) prólogo, dieciocho (XVIII) capítulos
El libro forma parte de la lista de los 100 libros del siglo XX publicados por el diario Le monde

Información del libro dispuesto en la contratapa: 

[“Aldoux Huxley fue un hombre extraordinariamente profético, no hay otro novelista en siglo XX que haya escrito una guía más sagaz del futuro” J.G. Ballard 

Un mundo feliz es un clásico de la literatura de este siglo, una sombría metáfora sobre el futuro. La novela describe un mundo en el que finalmente se han cumplido los peores vaticinios: triunfan los dioses del consumo y la comodidad, y el orbe se organiza en diez zonas en apariencia seguras y estables. Sin embargo, este mundo ha sacrificado valores humanos esenciales, y sus habitantes son procreados in vitro a imagen y semejanza de una cadena de montaje…

Comentario:

Leer Un mundo feliz como parte del conjunto de libros que tocan el tema sobre el control de la sociedad por parte del gobierno, ha sido una experiencia de lectura interesante. En esta novela ambientada en un futuro Londres, a diferencia de Zamiatin y Orwell, Huxley, se basa en la biología humana como el instrumento del gobierno para manipular a la especie humana desde la concepción (todo es vía fertilización in vitro) hasta el último aliento (las personas mueren a los 60 años, pero con la apariencia y energía de un adulto joven) con el único fin de que estas sean felices. 

El programa político de condicionamiento hace que cada ser humano, de acuerdo a las funciones que tendrá, se le clasifique en varias categorías, desde los alfa doble más, que son personas de una gran capacidad intelectual, pasando por los beta, gamma, delta, hasta los epsilones, que son personas analfabetas, pero cumplen una función mínima y complementaria en todo el sistema. (Cualquier parecido con el nombre de mi blog es pura coincidencia). 

Las personas solo se limitan a cumplir sus trabajos sin quejas ni murmuraciones y a actividades placenteras. No tienen ningún tipo de problemas físicos, intelectuales ni emocionales, no se cuestionan nada, no sufren, no tienen dudas, tormentos ni apuros económicos, no tienen remordimientos, no sienten tristeza ante la muerte ni misericordia por los desfavorecidos. No se casan, no tienen hijos, y solo cuando sienten alguna ligera molestia se administran unos gramos “soma”, que es una especie de relajante, que simplemente les hace olvidar todo. Desprecian los libros y a la naturaleza, porque sencillamente así los han condicionado desde bebes. 

Todo esto es producto de un minucioso control bioquímico y psicológico desde que son unos embriones hasta llegar a la adolescencia. Entra las técnicas más llamativas de condicionamiento es la hipnopedia, que consiste en emitir repeticiones consecutivas de frases establecidas durante el sueño en las diferentes etapas de vida de cada persona con la finalidad de que se les grabe en el subconsciente y actúen en base a esos principios. 

En resumen, es una nueva era de la humanidad, donde Dios ha sido reemplazado por Ford, probablemente el ideólogo de esta nueva sociedad, la tecnología esta sumamente desarrollada donde la gente se desplaza en taxicópteros, hay un control total sobre las personas, las cuales son como meros instrumentos al servicio del estado. Ese es el mundo feliz que se ha creado en esta era futura. 

Dentro de la historia, destacan los personajes de Bernard Marx y Helmholtz Watson que son alfas que de alguna manera pasó algo en sus orígenes que tienen una individualidad, se cuestionan muchas cosas y por esto mismo son castigados por el sistema exiliándolos a lugares lejanos donde no puedan “corromper el sistema”. 

Tenemos también a Lenina y Fanny que representan a toda la sociedad, son personas que solo se interesan por las apariencias y de la cantidad de hombres con que tienen que acostarse, así de claro lo dibuja el autor. 

Tenemos también al interventor, que es como uno de los líderes del sistema, Mustafá Mond, quien al igual que Bernard y Helmholtz también se cuestionaba y tenía ideas contrarias al sistema, pero le dieron a escoger entre el exilio o ser interventor y decidió lo segundo. Es su castigo, según él. Se priva de su felicidad para generar la felicidad a todos en general. 

Y finalmente tenemos a John y Linda, dos personajes que viven en Nuevo México (Estados Unidos) como una tribu milenaria. Son llamados salvajes por la civilización del mundo feliz. Linda es una civilizada, como Lenina y Fanny, que quedó atrapada en Nuevo México hace años luego de un viaje y del cual no pudo salir y John es su hijo, quien no fue condicionado y fue criado y educado de acuerdo con la cultura indígena. 

Cuando John es llevado a la civilización por Bernard, es interesante notar el choque cultural que se observa entre John y los civilizados. John, un joven que tan solo leyendo a Shakespeare aprendió a interiorizar la cultura occidental, universal, los valores y el sufrimiento humano y le fue totalmente impactante e insoportable conocer una sociedad así que prefirió la muerte a pertenecer a la civilización de la era Ford. 

Un mundo feliz, es una lectura muy interesante que nos permite reflexionar hasta que punto seremos capaces de sacrificar nuestra libertad y condición humana para alcanzar la felicidad añorada. 

No existe la posibilidad de elegir entre dos lealtades o fidelidades; todos están condicionados de modo que no pueden hacer otra cosa más que lo que deben hacer. Y lo que uno debe hacer resulta tan agradable, se permite el libre juego de tantos impulsos naturales, que realmente no existen tentaciones que uno deba resistir. Y si alguna vez, por algún desafortunado azar, ocurriera algo desagradable, bueno siempre se puede disponer del soma, que puede ofrecernos unas vacaciones de la realidad. El soma calma nuestra ira, y nos reconcilia con nuestros enemigos, nos vuelve pacientes y sufridos. En el pasado, tales cosas solo podían conseguirse haciendo un gran esfuerzo y al cabo de muchos años de duro entrenamiento moral. Ahora, usted se zampa dos o tres tabletas de medio gramo, y listo. Actualmente, cualquiera puede ser virtuoso. Uno puede llevar al menos la mitad de su moralidad en el bolsillo, dentro de un frasco. El cristianismo sin lágrimas: esto es el soma

Información sobre el autor dispuesto en la contratapa



Aldoux Huxley (1894-1963) es autor de varias novelas y ensayos que han recibido el aplauso unánime de la crítica y el público. Como Contrapunto, La isla y Las puertas de la percepción. Con Un mundo feliz dio a conocer las utopías más inquietantes del siglo, así como un talento literario difícilmente superable.

Otro dato:

Dejo aquí el link de un trailer de la serie basada en el libro que se estrenó este mes en Reino Unido y Estados Unidos.

domingo, 19 de julio de 2020

Nosotros (Yevgueni Zamiatin)

“El amor y el hambre rigen el mundo. Ergo: para dominar el mundo, el hombre ha de vencer a los dominadores del mundo”
Lectura # 141 



Ficha técnica:

Título del ejemplar: Nosotros
Autor: Yevgueni Zamiatin
País de autor: Rusia
Año del ejemplar: 1972
Editorial: Editorial Seix Barral S.A.
Título original: мы
Año de primera publicación (traducción al inglés del ruso original): 1924
Editorial: E. P. Dutton (New York)
Traducción: Juan Benusiglio
Género: Ciencia ficción. Distopía.
Edición: e-book versión de febrero de 2012

Otros datos
Páginas: 320 según información de Goodreads.
Contenido de la obra: Cuarenta (40) capítulos.
Premio Prometheus en la categoría Hall of Fame (1994)
Leído en la app Moon+ Reader Pro
Tiempo calculado de lectura según la app: 9.03 horas


Información sobre el libro

[En la ciudad de cristal y acero del Estado Único, separada por un muro del mundo salvaje, la vida transcurre sometida a la inflexible autoridad del Bienhechor: los hombres-números trabajan con horarios fijos, siempre a la vista de todos, sin vida privada: el “yo” ha dejado lugar a “nosotros”. El narrador de este diario íntimo, D-503, es el constructor de una nave interestelar que deberá llevar al universo “el bienaventurado yugo de la razón”. Pero se enamora: el amor equivale a rebelión, y el instinto sexual al deseo de libertad. Aunque, tras extirparle a D-503 el “ganglio craniano de la fantasía”, el Estado sedentario, entrópico, salga victorioso de la conspiración, allende sus muros siguen los hombres nómadas, llenos de energía, que generarán nuevos insurrectos: no existe, ni jamás existirá, la última revolución. Muchos lectores, al leer NOSOTROS, escrita entre 1919 y 1921, prohibido oficialmente hasta 1988 en la URSS, comprobarán cómo se anticipa magistralmente a todas las novelas posteriores sobre utopías totalitarias, sobre todo la de Orwell, 1984. Junto a Un mundo Feliz (Aldoux Huxley) y 1984(George Orwell) forma la trilogía clásica de novelas antiutópicas de la primera mitad de siglo XX

Comentario:

La literatura como un conjunto de textos donde cada escritor plasma toda su fantasía es tan inconmensurable y sorprendente que como lector me es difícil parar con esta actividad. 

Acabo de leer la novela rusa Nosotros, publicada en los primeros años de la década de 1920. Este libro fue la obra clave que influyó en George Orwell para escribir su famosa novela “1984”, y que, habiendo leído ambas me he percatado de que poseen gran similitud. 

Tras la publicación de la novela, el joven Zamiatin fue duramente criticado y sus obras fueron censuradas en Rusia. Recordemos que ya en esa época el destino de Rusia estaba dando un cambio radical, dejando atrás al imperio zarista y pasando a un régimen comunista, liderados por Lenin, Trotski, Stalin entre otros. 

En 1931 Zamiatin escribió una carta a Stalin solicitándole salir del país (tal como lo hizo en su momento Mikhail Bulgákov, autor de la célebre novela El maestro y Margarita). Gracias a Máximo Gorki, Zamiatin logró salir de Rusia e instalarse en Francia, donde terminaría sus días. 

Leer Nosotros, ha sido un descubrimiento sorprendente. Una novela de ciencia ficción de tipo libertaria, política. Similar a 1984, pero con un mayor componente fantástico y una constante exploración psicológica del personaje principal. 

Nosotros está ambientada aproximadamente en el siglo XXXII. Más de mil años en el futuro. Luego de la guerra de los Doscientos años la humanidad vive gobernada por un Estado Único, flanqueada por el Muro Verde de cristal, que lo separa de la naturaleza. El Estado Único tiene por misión dar la felicidad a todos los hombres, y para conseguir ello es necesario que se les desprenda la libertad. El líder supremo es llamado El Bienhechor que cada año es reelegido de forma unánime en una votación global y abierta. El Estado cuenta con vigilantes y son llamados Protectores. Es como una policía secreta que siempre está cerca de ti de forma agazapada vigilando que te comportes como es debido. Todo aquel que se sale de lo establecido es llevado por a la Máquina del Protector donde es fulminado con una descarga eléctrica. 

“¿Acaso no es precisamente esto que lo que hacemos? El hermoso sueño del Paraíso… ¿Lo conoce? En el Paraíso, los hombres ya nada desean, ya nada anhelan, allí ya no conocen la compasión ni el amor, allí solamente existen almas dichosas, a las que se les ha extirpado la fantasía con una operación (pues de lo contrario no serían felices): ángel, siervo del Señor…” (El Protector dirigiéndose a D-503) 

La ideología es la racionalidad extrema, no hay cabida para la subjetividad o la imaginación, todo se rige bajo la Tabla de las Leyes. Todo está programado y calculado. El Estado se ha encargado de asignar tareas específicas desde la hora en que te despiertas hasta la hora de acostarse. Y todos deben cumplirlos. Todos obedecen con gusto al Estado. Las personas viven en casas de cristal transparente. No hay vida privada, se ha perdido la individualidad, te controlan todo, incluso tu actividad sexual y la procreación. Cada uno es una millonésima parte del gran aparato estatal. Por eso se habla de “nosotros” y no de “uno”. 

“Cada mañana, nosotros, una legión de millones, nos levantamos como un solo hombre, todos a una misma hora, a un mismo minuto. Y a un mismo tiempo, todos, como un ejército de millones, comenzamos nuestro trabajo y al mismo instante lo acabamos”.
 
El personaje principal de la novela es un matemático, de número D-503. En ese futuro que nos revela el libro, los hombres no tienen nombres ni apellidos. El Estado le asigna a cada uno de los habitantes un código que será su identificación. Si la primera letra es consonante entonces se trata de un hombre y si la primera letra es una vocal se trata de una mujer. D-503, es uno de los constructores de una máquina espacial llamada El Integral. Y que, dentro de ciento veinte días, partirá al espacio para conquistar otros planetas y establecer su forma de gobierno. Por ello el Bienhechor (el líder supremo de toda esta organización futurista) aceptará de quienquiera que se sienta capaz de redactar un texto en favor del sistema para que sean leído por los habitantes de esas lejanas civilizaciones al que pretenden conquistar. Algo así como un evangelio. 

D-503, es uno de los que redactará un texto, y ese texto es la novela en sí misma. Escrita como un diario al que él llamará “Nosotros” y cada capítulo sus “anotaciones”. 

Pero el problema de la historia es que existen algunos números (así se les llama a las personas) que aún conservan ese instinto de libertad y que en secreto desean rebelarse contra el sistema y D-503 será arrastrado a esa corriente involuntariamente luego de conocer a I-330, una mujer, alguien completamente enigmática para él a tal punto que no puede definirla racionalmente. 

A raíz de ese encuentro D-503 empezará a dejar de lado a O-90 y a interesarse más y más por I-330. D-503 poco a poco empezará a experimentar cosas que él mismo no las comprende y no sabrá diferenciar lo real de lo imaginario. 

El departamento de Salud le diagnostica la peor de las enfermedades que puede tener alguien del Estado Único, una enfermedad tan antigua, como las civilizaciones del siglo XX, pero mil años después es inusual que alguien lo presente. D-503 es diagnosticado de poseer un alma. 

A partir de entonces la trama se vuelve más poética como compleja toda vez que las páginas del diario lejos de mencionar las bondades del Estado Único se centra en lo que él va experimentado día a día. En ese proceso de angustia que refleja el conflicto psicológico que va intrincándose a medida que tiene más cercanía con I-330 y más aún cuando le revela sus planes. 

“La fantasía es el último obstáculo en el camino hacia la felicidad” 

Una novela muy interesante de ciencia ficción pionera en el género de las distopías. Esta novela trazó el camino para otras como 1984 o Un mundo Feliz. El libro aborda varios temas como la libertad individual, la felicidad entendida como la renuncia a la libertad, la pérdida de la identidad, la deshumanización, un modelo anti-utópico de una sociedad bajo un gobierno totalitario, entre otros. 

El mismo George Orwell hizo la reseña de la novela en 1946, aquí la comparto.

Información sobre el autor tomado de Wikipedia



Yevgueni Zamiatin nació en una localidad al sur de Moscú. Su padre fue sacerdote de la Iglesia Ortodoxa Rusa y maestro de escuela, y su madre música. Estudió ingeniería naval en el Instituto Politécnico de San Petersburgo entre 1902 y 1908, tiempo durante el cual se unió a los bolcheviques. Fue arrestado durante la Revolución rusa de 1905 y exiliado, pero regresó a San Petersburgo donde vivió ilegalmente antes de asentarse en Finlandia en 1906 para terminar sus estudios. 

Tras su regreso a Rusia empezó a escribir como pasatiempo. Fue arrestado y exiliado por segunda vez en 1911, aunque fue amnistiado en 1913. La obra Un cuento provincial (Уездное) escrita en 1913, en donde satirizaba la vida de un pequeño poblado ruso, le trajo cierto grado de reconocimiento. Se dio a conocer durante la Primera Guerra Mundial con la publicación de una novela antimilitarista, En medio de la nada, censurada por las autoridades zaristas. 

Inmediatamente después de la Revolución de Octubre de 1917, escribió en Gran Bretaña los relatos Los insulares (1918) y El pescador de hombres (1921), y publicó su obra maestra, la novela Nosotros (1921), que le valió una orden de prohibición de publicación en su país y que estuvo prohibida en la URSS hasta 1988. Comenzó a escribir Nosotros en 1919 y aunque la terminó en 1921 ni tenía título ni se pudo publicar en esa fecha. Fue la primera novela que iniciaba el género distópico, pero la primera vez que vio la luz fue en Reino Unido en 1924, de manera incompleta y aún por titular por el autor. Fueron los británicos quienes la llamaron Nosotros para poder hacer su edición. En 1927, sin permiso de los editores ni del autor, la editorial y revista de exiliados rusos editada en Praga Volya Rosii publicó por entregas el libro. Esto provocó una serie de problemas al autor con las autoridades soviéticas. Zamiatin intentó exiliarse varias veces dado que las medidas censoras y económicas contra él eran cada vez mayores. Su éxito mundial ocurrió en 1929 cuando la novela fue editada en Francia. En 1932, emigró a París. Antes de exiliarse, publicó el relato La inundación (1929). Murió en París en 1937 en la extrema pobreza, víctima de una angina pectoral. Nosotros influyó en Aldous Huxley y George Orwell. Ellos mismos declararon su admiración por la obra de Zamiatin. Los tres son considerados padres del género de la distopía o antiutopía

domingo, 12 de julio de 2020

13,99 euros (Frédéric Beigbeder)

"Todos los que critican la sociedad del espectáculo tienen una tele en casa. Todos los que desprecian la sociedad de consumo tienen una tarjeta Visa. La situación resulta inextricable. Nada ha cambiado desde Pascal: el hombre sigue huyendo de su angustia a través de la diversión. Solo que la diversión se ha convertido en algo tan omnipresente que ha reemplazado a Dios. ¿Cómo huir de la diversión? Enfrentándonos con la angustia"

Lectura # 140



Ficha técnica:

Título del ejemplar: 13,99 euros.
Autor: Frédéric Beigbeder
País del autor: Francia
Año del ejemplar: 2002 (segunda edición)
Título original: 99 Francs
Año de publicación en el idioma original: 2000
Idioma original: francés
Editorial original: Éditions Grasset & Fasquelle París
Traductor: Sergí Pámies
Género: Novela satírica
Editorial: Anagrama
Edición: e-book
Otros datos:
Páginas: 272 en paperback

Contenido de la obra: Parte I (9 capítulos), parte II (7 capítulos), parte III (6 capítulos), parte IV (7 capítulos), parte V (7 capítulos), parte VI (6 capítulos), notas

Leído en la app Moon+ Reader Pro
Tiempo calculado de lectura según la app: 7.62 horas de lectura


Información sobre el libro:

[Octave Parango, creativo publicitario, es un joven triunfador, forma parte de quienes deciden lo que el público deseará mañana: «un escritor publicitario es el autor de aforismos que venden». Pero, asqueado de esa industria y sus manipulaciones, decide escribir un libro en el que denunciará los entresijos de la publicidad, para así conseguir que le despidan de la poderosa agencia en la que trabaja. Éste es el punto de partida de 13,99 euros, en el que el narrador protagoniza un enloquecido viaje a los infiernos rituales –drogas, sexo y violencia– con un estilo que ha sido comparado con Bret Easton Ellis y también con Michel Houellebecq, que fue quien le animó a escribir «el libro auténtico sobre el medio publicitario». 

Novela cruel, panfleto insolente y alegato contra la manipulación consumista, 13,99 euros se convirtió en un auténtico fenómeno de masas en Francia, uno de los mayores bestsellers de los últimos años. «Esta novela describe el maravilloso mundo de la comunicación moderna: un mundo en el que se gastan miles de millones para despertar entre personas que no pueden permitírselo el deseo de comprar cosas que no necesitan. Es un libro sobre nuestra sociedad, la vuestra, la mía, la que yo mismo contribuí a forjar durante mis diez años de presencia en las agencias de publicidad, la que todos hemos dejado crecer por despecho», dice el autor, al tiempo que recuerda que la experiencia de Octave está inspirada en la suya: poco antes de publicar su novela, Frédéric Beigbeder fue despedido de Young & Rubicam, la agencia en la que trabajaba. 

«Un heraldo de la joven literatura francesa» (Le Figaro). 

«Un cuento picante que sucede en un ambiente de tiburones, el dólar en las pupilas, las narices polucionadas por la cocaína y el cerebro nublado por el éxito fácil. Impregnado de anticonformismo anglosajón, el autor se reconoce muy influenciado por autores norteamericanos, de Miller a Bukowski, pasando por Kerouac» (Emmanuelle Jowa, Le Matin). 

«Beigbeder, escritor y joven príncipe del planeta publicitario, no deja títere con cabeza. Con fuerza, talento y provocación, como un auténtico enamorado de la literatura» (François Nourissier, de l’Académie Goncourt, Le Point). 

«Un adiós a la publicidad mediante una novela enloquecida y terrorífica sobre ese universo que ha fascinado al autor» (Le Monde). 

«Frédéric Beigbeder habría podido escribir un panfleto, pero ha logrado la proeza de convertirlo en novela, primero ligera, luego cruel y, al final, complemente gore» (Jérôme Garcin). 

«Sin falsa publicidad, este libro vale lo que cuesta: es decir, relación adecuada calidad-precio» (André Rollin, Le Canard Enchaîné).] 



Portada del libro con el título original: 99 francs


Comentario


"Los políticos ya no controlan nada; es la economía la que gobierna. El marketing es una perversión de la democracia: es la orquesta la que manda sobre el director. Son los sondeos quienes deciden la política, las encuestas las que hacen la publicidad [...], los índices de audiencia los que hacen la televisión... "


Es la segunda novela de este corrosivo escritor francés llamado Fréderic Beigbeder. El primer libro que leí fue “El amor dura tres años”, la entrada que hice en el blog está aquí.

Confirmo la semejanza en el estilo narrativo que tiene con el escritor peruano Jaime Bayly, aunque el francés es aún más mordaz y deslenguado. 

En esta oportunidad, la novela trata sobre el mundo de la publicidad visto desde sus entrañas. Narrado en primera persona por Octave, personaje principal, quien se desempeña como creativo en una gran empresa de publicidad. Le va de maravilla, con solo 2 frases es capaz de conseguir embolsarse miles de euros, obtener boletos de vuelo a cualquier lugar del mundo y vivir ocioso en la playa en compañía de las mujeres que quiera, alcohol y sobretodo cocaína. 

“La gente suele preguntarme por qué los creativos están tan bien pagados. Un redactor que tarda una semana en escribir un artículo para el periódico Le Figaro cobrará cincuenta veces menos que un creativo free-lance que tarda diez minutos en parir un cartel ¿Por qué? Simplemente porque el creativo hace un trabajo que genera más dinero” 

"Lástima que solo tenga dos fosas nasales, sino me metería más: la coca es un "destructor de angustias", decía Freud..."

Pocos renunciarían a una vida así, yo con los euros me conformaría. Y Octave vive con el pie en el acelerador. Su mundo se resume en unas pocas horas de trabajo en oficina y gran parte del día a disfrutar en parrandas llenas de excesos. 

Pero Octave, está llegando al límite. Con preocupación se va dando cuenta que sus compañeros van cayendo presas de esa vida desenfrenada y él tiene miedo de caer a lo más hondo. Se empieza a dar cuenta que el medio en el que se desenvuelve, el mundo de la publicidad es el gran responsable de esa gran caída en espiral, una caída continua y prolongada en el que se pierde la noción de lo valioso en la vida y se confunde con lo banal y dañino. 

Por eso, Octave escribe este libro, para que sea echado de su empresa. Porque quiere cortar de raíz todo y volver a empezar. Una historia que sirve como ejemplo para explicar la insoportable levedad del ser. 

“Todo es provisional y todo se compra. El hombre es un producto como cualquier otro, con fecha de caducidad. Esta es la razón por la cual he decidido jubilarme a los treinta y tres años. Dicen que es la edad ideal para resucitar”. 

Una interesante novela donde expone cómo el ser humano ha perdido el rumbo sin darse cuenta, se ha abandonado a perseguir el dinero, comodidades y el placer a costa de un alma vacía. Pero quien manipula los hilos de estos actos es la gran maquinaria de la economía que en este caso se trata del mundo publicitario. 

“ Big Brother is not watching you, Big brother is testing you”

La historia fue llevada al séptimo arte francés en el 2007, comparto un fragmento de la película en francés con subtítulos en inglés.



Sobre el autor:




Frédéric Beigbeder (Neuilly-sur-Seine, 1965) es autor de varias novelas, un libro de cuentos, tres ensayos y tres libros de entrevistas. Desde 2013 dirige la renacida revista Lui. Durante diez años simultaneó su trabajo publicitario con colaboraciones como cronista de la noche o crítico literario en revistas, periódicos y programas de radio y televisión. Con 13,99 euros tuvo un éxito extraordinario. Fue despedido fulminantemente de la agencia de publicidad en la que era un brillantísimo creativo, pero encabezó durante meses las listas de los libros más vendidos. En España, la novela tuvo también una acogida espectacular: «Impagable testimonio de un profesional que durante años ha alimentado las calderas de la publicidad con un afilado ingenio» (Llàtzer Moix, La Vanguardia). En Anagrama han aparecido también otras cinco novelas del autor, El amor dura tres años, Windows on the World (Pre-mio Interallié), Socorro, perdón, Una novela francesa (Premio Renaudot) y Oona y Salinger, así como Último inventario antes de liquidación, en el que reseña de forma aguda y desenvuelta los cincuenta mejores libros del siglo XX según una encuesta llevada a cabo por Le Monde y la FNAC.”

domingo, 5 de julio de 2020

1984 (George Orwell)

“La guerra es la paz 
La libertad es la esclavitud 
La ignorancia es la fuerza” 
(Las tres consignas del partido)

Lectura # 139



Ficha técnica:
Título del ejemplar: 1984
Autor: George Orwell
País de autor: Inglaterra, Reino Unido
Año del ejemplar: ----
Título original: Nineteen Eighty-Four
Año de publicación en el idioma original: 1949
Idioma original: inglés
Traducción: Miguel Temprano García
Género: Ciencia ficción. Distopía.
Editorial: Editorial digital libra
Edición: e-book
Otros datos:
Páginas: 320 según información de Wikipedia
Contenido de la obra: Prólogo de Umberto Eco a la edición italiana de Mondadori, colección Omnibus, enero de 1984; tres (3) partes: la primera parte consta de ocho capítulos, la segunda de diez y la tercera de seis capítulos; un (01) apéndice, un (01) epílogo escrito por Thomas Pynchon y una sección de notas.
La novela se encuentra en la lista de Los 100 libros del siglo XX según Le Monde
Premio Prometheus en la categoría Hall of Fame (1984)
Leído en la app Moon+ Reader Pro Tiempo calculado de lectura según la app: 18.55 horas

Información sobre el libro consignado en la contratapa:

[«No creo que la sociedad que he descrito en 1984 necesariamente llegue a ser una realidad, pero sí creo que puede llegar a existir algo parecido», escribía Orwell después de publicar su novela. Corría el año 1948, y la realidad se ha encargado de convertir esa pieza —entonces de ciencia ficción— en un manifiesto de la realidad. En el año 1984 Londres es una ciudad lúgubre en la que la Policía del Pensamiento controla de forma asfixiante la vida de los ciudadanos. Winston Smith es un peón de este engranaje perverso y su cometido es reescribir la historia para adaptarla a lo que el Partido considera la versión oficial de los hechos. Hasta que decide replantearse la verdad del sistema que los gobierna y somete.]

Comentario


“Y si todos aceptaban la mentira impuesta por el Partido –si todos los archivos contaban la misma mentira–, la mentira pasaba a la historia y se convertía en verdad. “Quien controla el pasado –decía la consigna del Partido– controla el futuro. Quien controla el presente controla el pasado”

1984 ha sido una de las lecturas que más me ha costado leer. Es un texto en el que el autor se proyectó alrededor de 36 años en el futuro (George Orwell escribió la obra entre 1947 y 1948) y nos reveló cómo hubiera sido la sociedad y el sistema de gobierno en ese futuro distópico. 

“Los dos fines del Partido son conquistar toda la superficie de la tierra y acabar de una vez por todas con la posibilidad del pensamiento independiente.”
 

1984 es una novela de ciencia ficción, es una crítica feroz contra los regímenes totalitarios y sus perversas prácticas. El libro ha batido récords en ventas y ha sido traducido a muchos idiomas. George Orwell barajaba dos nombres para darle el título al libro, uno era 1984 y el otro El último hombre de Europa, que, en mi opinión, luego de leer la novela, me gusta más este último. 

Resumiré la novela, estimado(a) lector(a) tenga cuidado a partir de ahora porque no podré evitar poner spoilers, me será inevitable pasarlos por alto. 

El sistema del mundo era como sigue: En aquella época (1984) existían tres superpontencias mundiales (Oceanía, Eurasia y Esteasia) que emergieron luego de la tercera guerra mundial sucedida en la década de 1950. Cada superpotencia, que estaban en una guerra continua entre sí, estaba conformada por un grupo de países, la imagen de abajo muestra claramente las divisiones geopolíticas de esa época. 


La historia que nos cuenta el libro se sitúa en Londres, la principal ciudad de la Franja Área Uno (antiguamente denominada Inglaterra o Gran Bretaña) y que formaba parte de la superpotencia Oceanía. 

El personaje principal de la novela es Winston Smith, un funcionario público del Partido exterior, que trabaja en el Ministerio de la Verdad (Minvir, en nuevalengua) y que se encarga de alterar el pasado a conveniencia del partido manipulando los archivos históricos, de tal manera que no existan pruebas de que el gobierno esté haciendo algo indebido. Lleva una vida monótona y no está de acuerdo en cómo se están llevando las cosas, aunque no lo expresa en lo más mínimo porque si lo hiciera, aunque sea con un insignificante gesto o pensamiento, sería rápidamente pillado por la Policía del Pensamiento y las telepantallas instaladas en su casa, trabajo y en todo lugar. 

Oceanía estaba gobernada por un partido único bajo la ideología Socing (Socialismo inglés) que en la práctica era un modelo Totalitario llevado al extremo cuyos fines eran mantenerse en el poder por los siglos de los siglos y para lograr tal fin se encargaban de “lavar el cerebro” a la sociedad llenándolo de su doctrina. 

La sociedad en Oceanía se estructuraba de forma piramidal de la siguiente manera: en la punta de la pirámide tenían al líder, un ente omnisciente, omnipresente y omnipotente, es decir era como un dios, más aún cuando no se lee en ninguna parte del texto que la gente crea en el Dios cristiano…tal parece que era una sociedad atea… 

“Somos sacerdotes del poder –prosiguió –, Dios es poder. Pero de momento el poder es solo una palabra para ti. Ya es hora de que te hagas una idea de lo que significa el poder.”


El líder era llamado el Hermano Mayor o el Gran Hermano (en otras traducciones), luego, había dos secciones: El Partido Interior que lo conformaban los funcionarios públicos de mayor peso político y representaban aproximadamente el 2% de la población de Oceanía (Oceanía tenía alrededor de 300 millones de habitantes) y el Partido Exterior que era formado los funcionarios públicos de menor peso político y que representaban el 13% de la población total. Finalmente, la gran masa poblacional que representaba el 85% de la población total, eran los denominados Proles. Según el Partido, las proles eran individuos inofensivos que nunca osarían en rebelarse contra el sistema porque apenas les alcanzaba la vida para ocuparse de sus apuros del día a día. Es decir, haciendo una analogía con la estructura social clásica, estas tres secciones equivalían a la clase alta, media y baja. 


El Partido tenía un gran enemigo y era Emmanuel Goldstein. Era el hombre más odiado del partido. No se sabía noticia alguna de su paradero, pero era considerado como el más grande traidor. Se le atribuyó la autoría del libro “Teoría y Práctica del Colectivismo Oligárquico”. Para satisfacer su curiosidad de lector, el autor se encargó de incluir muchas páginas de ese libro dentro de la novela para que pueda usted enterarse con más detalle la ideología del socing. 

Libro ficticio de Emmanuel Goldstein "Teoría y práctica del colectivismo oligárquico"

El Partido, experto manipular a su población, creó “Los Dos Minutos de Odio”, el cual consistía que cada cierto tiempo a lo largo de la jornada laboral haya una interrupción para que todo el personal pase a una habitación llena de sillas y una telepantalla frente de ellas. El personal tomaba asiento, la telepantalla se encendía y empezaba a emitir imágenes del traidor Goldstein y entonces en ese momento toda la gente empezaba a descargar todo el odio o el miedo contenido vociferando todas las groserías que pudieran contra Emmanuel Goldstein. El comportamiento era algo así como se comportan los troles en Twitter. 


“Lo más horrible de los Dos Minutos de Odio no era que la participación fuese obligatoria, sino que era imposible no participar. Al cabo de treinta segundos, se hacía innecesario fingir. Un espantoso éxtasis de temor y afán de venganza, unos deseos de asesinar, torturar y aplastar caras con un mazo parecían recorrer a todo el mundo como una corriente eléctrica, y lo convertía a uno, incluso en contra de su voluntad, en un loco furioso”
 


Representación de Los Dos Minutos de Odio

Nadie hubo visto al líder supremo, pero lo amaban. Se le conocía como El Hermano Mayor o El Gran Hermano. En la zona cerca a los edificios de los ministerios se veían carteles con su rostro. 


“En un extremo (del vestíbulo) habían colgado en la pared un cartel coloreado y demasiado grande para estar en el interior. Representaba solo una cara enorme de más de un metro de ancho: el rostro de un hombre de unos cuarenta y cinco años, con un espeso bigote negro y facciones toscas y apuestas”


"Era uno de esos carteles pensados para que los ojos te sigan cuando te mueves"

¿Se le vino a la mente aquel programa de televisión de entretenimiento en el que podías observar durante las 24 horas del día cómo era la convivencia de un grupo de jóvenes desconocidos?, pues ese era el método de vigilancia que se aplicaba en el socing. En casas, lugares de trabajo, en la calle y en todo lugar donde menos te imaginas había unas planchas metálicas rectangulares instaladas, eran unos televisores que en la novela se denominaba telepantallas. Las telepantallas servían para trasmitir la propaganda del partido a cada momento y al mismo tiempo funcionaba como cámara de vigilancia, esto último era la principal función. No podías apagarlo a menos que formes parte del Partido Interior y eso solo te daba derecho a apagarlo por 30 minutos como máximo. 

Según Goldstein, a través de la Historia, la clase media siempre aspira alcanzar el Poder y la clase alta es la que intenta por todos los medios mantenerse en él. De esta manera la vigilancia se ejercía con un gran rigor precisamente en la clase media, es decir sobre los miembros del Partido Exterior. Con respecto a las proles, el partido no creía necesario vigilarles porque no los consideraba una amenaza. 

Así, lo que se narra en la novela era el control del Partido Interior sobre el Exterior básicamente. Recordemos que Winston Smith, el personaje principal, forma parte del Partido Exterior. 

Bien, como decía, te vigilaban a cada momento del día, estaban alertas para pillar a cualquiera que acometiera un crimental, es decir, que se exprese de forma distinta a los intereses del partido ya sea de palabra, obra o gesto e incluso pensamiento porque si aquella persona hacía algo así significaba que prácticamente era su fin. 


“El crimental no supone la muerte: el crimental ES la muerte”
 


Smith inicia a escribir en su diario

Serían conducidos al Ministerio del Amor donde los torturarían de la manera más cruel que te puedas imaginar, serían conducidos la habitación 101, y a fuerza de tantas torturas te despojarían la dignidad, de todo lo valioso de un ser humanos, del sentido de justicia, de los sentimientos más nobles y prácticamente te convertirías em un zombi, en alguien desprovisto de toda capacidad de discernimiento, que no puede diferenciar la realidad de la mentira. Serías fácilmente manipulable y si anteriormente odiaban al sistema, después de todo ese calvario donde claramente el gobierno atentaría contra sus derechos fundamentales, terminarían, sorprendentemente, amando al sistema con todo tu ser. En ese instante estarían curados y sería el momento adecuado para borrarles de la historia. 


“Tu nombre se eliminaba de los archivos, borraban hasta la última referencia a cualquier cosa que hubieras hecho, tu antigua existencia se negaba y luego cala en el olvido. Eras abolido, aniquilado: “vaporizado” era la palabra que usaban…” 


Y si no te pillaba La Policía del Pensamiento (quien vigilaba en todo lugar, mimetizado en otras personas para que no se dieran cuenta de ello y a través de las telepantallas), te acusaban los niños que formaban parte de la sección de Espías. Eran niños muy bien adoctrinados al servicio del Partido. 


“¡Eres un traidor! – chilló el niño – ¡Un criminal mental! ¡Un espía de Eurasia! ¡Te voy a pegar un tiro, te vaporizaré y te enviaré a las minas de sal!”
 


Los niños eran adoctrinados como espías

En la novela, la actitud de los niños era claramente una razón suficiente de un orgullo tremendo para sus padres. 


“Son unos críos muy traviesos, pero si se trata de devoción…No piensan más que en los Espías, y en la guerra, claro. ¿Sabes lo que hizo el sábado mi hija cuando su tropa salió de excursión cerca de Berkhamsted? Convenció a otras dos niñas de que la acompañaran, se escabulleron del grupo y se pasaron la tarde siguiente a un desconocido. Estuvieron siguiéndolo más de dos horas por el bosque y luego, cuando llegaron a Amersham, lo denunciaron a una patrulla.” 

El partido, además, creó un nuevo sistema de comunicación, la nuevalengua, basado en el inglés, recordad que la historia se desarrollaba en Londres, y que consistía en reducir la mayor cantidad de vocabulario posible y simplificar al máximo la forma de comunicación de tal manera que no puedas encontrar palabras para poder expresar pensamientos críticos o analíticos. 

Una de las creaciones más sorprendentes fue el concepto del “doblepiensa”, en la cual consistía en una manera de pensar donde podías aceptar y rechazar una creencia al mismo tiempo, dependiendo de las circunstancias. Por ejemplo, si el Partido dice que 2 + 2 = 5 tú debías de creerlo, pero si lo escuchabas del enemigo entonces le criticarás ferozmente. Pero se tenía que hacer de forma inconsciente, automático. Que esa forma de romper con la lógica esté anclada en las profundidades de tu mente. 


Es increíble lo atroz de la ideología del Partido que incluso desaparecieron la palabra “ciencia”. No hubo más investigación científica, no hubo más generación de conocimiento a menos que sea solo con fines al servicio del Partido. 


“En nuevaluengua no hay ninguna palabra que signifique “ciencia”. El método empírico del pensamiento, en el que se basaron todos los logros científicos del pasado, se opone la la mayoría de los principios del Socing…El científico de hoy o bien es una mezcla de psicólogo e inquisidor, que estudia con extraordinaria minuciosidad el significado de las expresiones faciales, los gestos y tonos de voz, e investiga los efectos de las drogas, las terapias de choque, la hipnosis y la tortura física para arrancar la verdad a los prisioneros; o es un químico, físico o biólogo dedicado a aquellas ramas de su especialidad que sean relevantes para matar.”
 

Entonces, lo que veremos en la novela será el trayecto kafkiano que recorrerá Winston Smith (puede darle una mirada a la entrada del blog sobre la novela "El Proceso" de Franz Kafka) desde el momento en que decide rebelarse contra el sistema, es decir, desde el momento en que comete el “crimental” -palabra en nuevalengua- hasta el momento en que será un nuevo individuo. Confiará en O`Brien, leerá el libro de Goldstein, vivirá un romance con Julia, tendrá esperanzas, luego el sistema ejercerá todo su poder contra él. 


“…el delito esencial que incluía todos los delitos. Lo llamaban el “crimental”. El crimental no podía ocultarse eternamente. Podías disimularlo un tiempo, incluso unos años, pero antes o después acababan descubriéndote…”
 

En la historia también aparecerán otros personajes importantes como Julia, una joven perteneciente a la liga Juvenil Antisexo, que buscaba romper las reglas sin que sea pillada. Simulaba obedecer al Partido, pero lo odiaba en su fuero interno. Encuentra en Smith un aliado y un amante. 


O`Brien, miembro del Partido Interior y que representará en el imaginario de Smith el aliado poderoso y leal capaz de luchar para destruir al sistema. 

El señor Charrington, un anciano vendedor de antigüedades quien le venderá un diario a Winston y le alquilará un espacio donde ocultarse. 

George Orwell con esta obra de ciencia ficción recoge lo peor de los regímenes del siglo XX (nazismo y estalinismo) y sirve como una gran alarma, una profecía política de los fines perversos que persiguen los gobiernos de turno para perpetuarse en el poder haciéndoles creer que todo va de maravilla, que la economía mejora año a año, que la calidad de vida es mejor y que no hay motivos para rebelarse porque te están lavando el cerebro sin que te des cuenta de ello. 

Cuando George Orwell escribía esta novela era consciente del poco tiempo que le quedaba de vida (pocos años después fallecería de tuberculosis) y con esta obra el escritor inglés descarga todo su odio contra los regímenes totalitarios y violadores de derechos humanos. 


Y luego de pronto… se dispararían los cañones de su odio -contra el sistema-… El pensamiento herético quedaría sin castigo…Morir odiándolos, en eso consistía la libertad” 

Una lectura recomendable. 

Otras obras de ciencia ficción que tocan la misma temática de un modelo político opresor y violador de derechos humanos son “Nosotros” (Yevgueni Zamiatin) publicada en 1922, Fahreinheit 451 (Ray Bradbury) publicada en 1953 y Un mundo feliz (Aldoux Huxley) publicada en 1932. 

Información sobre el autor tomado de Wikipedia


Eric Arthur Blair (Motihari, Raj Británico, 25 de junio de 1903​-Londres, Reino Unido, 21 de enero de 1950), más conocido por el pseudónimo de George Orwell, fue un escritor y periodista británico. 

Su obra lleva la marca de las experiencias personales vividas por el autor en tres etapas de su vida: su posición en contra del imperialismo británico que lo llevó al compromiso como representante de las fuerzas del orden colonial en Birmania durante su juventud; a favor del socialismo democrático, después de haber observado y sufrido las condiciones de vida de las clases sociales de los trabajadores de Londres y París; y en contra de los totalitarismos nazi y estalinista tras su participación en la guerra civil española. 

Además de cronista, crítico de literatura y novelista, es uno de los ensayistas en lengua inglesa más destacados de las décadas de 1930 y de 1940. Sin embargo, es más conocido por sus críticas al totalitarismo en su novela corta alegórica Rebelión en la granja (1945) y su novela distópica 1984 (1949), escrita en sus últimos años de vida y publicada poco antes de su fallecimiento, y en la que crea el concepto de «Gran Hermano», que desde entonces pasó al lenguaje común de la crítica de las técnicas modernas de vigilancia. 

En 2008, figuraba en el puesto número dos del listado de los cincuenta escritores británicos de mayor relevancia desde 1945, elaborado por The Times.​ 

El adjetivo «orwelliano» es frecuentemente utilizado en referencia al distópico universo totalitarista imaginado por el escritor británico.