martes, 31 de enero de 2023

Memorias del subsuelo (1864, Fiódor Mikhailovich Dostoievski) una relectura


Memorias del subsuelo marca un cambio en el estilo de la creación literaria de Fiódor Mikhailovich Dostoievski.
Nos encontramos con un personaje con un discurso feroz en contra del hombre del siglo XIX que ya se presentaba en su Notas de invierno sobre impresiones de verano.
El hombre del subsuelo, que ha permanecido oculto en su agujero asqueado de su entorno y presa de una reflexión constante sobre su época, ha decidido salir a la luz, coger un cuaderno y anotar todo lo que tenía acumulado.
La fiereza de su discurso y la lucidez del mismo sorprende, asimismo nos acongoja el sufrimiento que experimenta. Es un hombre con sed de Cristo y fe pero al mismo tiempo se sabe corrompido y vive en constante tensión entre el obrar y pensar bien o mal. 
El hombre del subsuelo sería un ser posible de aquel joven soñador de Noches blancas. El hombre del subsuelo es un tipo de hombre superfluo, recordemos a Chulkaturin de Turgueniev o a Chatski de Griboyédov. Un ser de gran inteligencia y que precisamente por eso no puede tener éxito en la San Petersburgo que le toca vivir. El hombre del subsuelo ha acumulado resentimiento contra la sociedad y contra él mismo por su impotencia de alcanzar una identidad. Tiene un amor propio exaltado que se siente humillado a lo largo de su vida. Precisamente por eso guarda un rencor inmenso que le hace desear vengarse de sus verdugos, como Silvio del cuento El disparo de Aleksandr Serguéyevich Pushkin.
Defiende a ultranza la libertad y la voluntad, virtudes que son pervertidas por su moral. El hombre del subsuelo es un hombre malo en esencia aunque de tradición cristiana, es un hombre que ha fracasado en todo por su imposibilidad de "vivir la vida", por no saber vivir en esa realidad de clima helado y nieve derretida pero que es un héroe en sus sueños. Un personaje que dejará huella y generará una corriente de pensadores llamados "existencialistas". 

Libro recomendable.

Primera nota aquí 

4 comentarios:

  1. No recuerdo bien una frase de algún griego que venía a significar la tristeza de una sabiduría adquirida que no conlleva ningún poder, llámese prestigio. La sabiduría que no recibe el respaldo de los demás será, obviamente, amarga. En todo caso, tendré que leerlo para valorarlo, pues Dostoievski seguro que nos presenta a un tipo humano peculiar.
    Saludos.

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  2. Estoy seguro que le encontrarás muchos tópicos para analizar esta obra pese a su corta extensión, no solo sobre el personaje en sí mismo sino también de la época que critica. Muchas gracias por pasar a leer la nota y dar un comentario. Saludos cordiales.

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  3. Tengo a Dostoievski muy pendiente. A ver si me pongo con su obra. Un saludo Eduardo

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    1. Es una gran idea, Esther. Muchas gracias por comentar. Saludos cordiales.

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